Retomando la actividad y hablando de mis relatos

¡Hola de nuevo, gente de mundo!

He estado un poco ausente estos últimos meses. Ha sido un verano un poco extraño y necesitaba recuperarme de todo lo ocurrido.
Tampoco el trabajo me ha dado tregua. Cada día llevo peor lo de vivir en un pueblo turístico que está desierto nueve meses y medio al año y se vuelve agobiante los otro dos y medio. Las aglomeraciones, las prisas, el no poder atender bien por estar desbordados, la mala educación de la gente… También el no tener apenas tiempo para mí. Llevo tiempo planteándome lo de si debería cambiar de aires. Pero tampoco sé muy bien qué podría hacer si no es lo que ya hago. Qué complicada es la vida.

El caso es que voy a intentar retomar las entradas en el blog, a pesar de que sigo un poco dispersa y me cuesta concentrarme, a ver si el hecho de tener una pequeña obligación me ayuda a recuperar la ilusión y las ganas de hacer cosas.
Para ello estoy preparando un par de reseñas, una de ellas de un libro con el que he disfrutado mucho y que me he leído en un par de días, a pesar de que ahora mismo no me entra casi ninguna lectura.


Y aprovecho para comentaros que desde principios de verano están disponibles dos de las antologías de las que os hablé y que incluyen dos relatos míos:


Si os animáis a leerlos ya me contaréis qué os han parecido. Espero ansiosa vuestras opiniones.

Y recordad que si queréis seguirme la pista, estoy por Twitter desvariando y quejándome de lo mucho que me molesta todo.

¡Un abrazo para todas y todos!

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